La historia de la Cofradía Virgen de los Dolores no es solo una historia plagada de fechas, de datos históricos, sino una historia escrita con momentos únicos, con personas anónimas, con las ilusiones de todos los cofrades que por ella han pasado. Tanto es así que nuestro camino en la Semana Santa de Cullera comienza tras la guerra civil española de manos de una familia que por su gran devoción mariana hacen esculpir la imagen de la Virgen Dolorosa sin dejar constancia de sus nombres y comienzan a sacarla en procesión junto con tres familias más en el entierro del Viernes Santo. Esta imagen todavía se conserva en la actualidad en la Parroquia de Santos Juanes de Cullera.

Es en 1957 cuando finalmente un grupo de veintinueve jóvenes, aunque con poco presupuesto y muchas dificultades pero gran ilusión, deciden fundar la Cofradía Virgen de los Dolores. Estos jóvenes eran en su totalidad hombres ya que todavía no estaba permitida la incorporación de la mujer en cofradías, pero era tal la devoción de muchas jóvenes que también acompañaban a la Virgen Dolorosa vestidas con teja y mantilla.

Desde entonces y hasta la actualidad nuestra Cofradía, al igual que otras muchas, ha pasado por momentos críticos pero siempre ha sabido mantenerse y llegar a nuestros días gracias al esfuerzo de múltiples cofrades y diferentes colaboradores.

Con la llegada de cada Semana Santa aumenta la espiritualidad de todos nosotros, crecemos como personas y como cristianos, poco a poco maduramos en la fe católica. Por ello aunque cada Semana Santa parezca igual a la anterior siempre provoca en cada uno de nosotros nuevos sentimientos, nuevas esperanzas, renovadas ilusiones y todo ello hace que nos esforcemos por transmitir todos estos sentimientos al resto de ciudadanos de Cullera que como cada año esperan con fervor ver pasar la imagen de la Virgen por sus calles.